Un maestro cervecero neozelandés presentó este viernes un aparato doméstico capaz de preparar 23 litros de cerveza en siete días, un cuarto del tiempo que de lo que dura el proceso.
Esta máquina es la primera cervecera personal del mundo, declaró en la televisión neozelandesa.
Elimina los problemas de oxidación, control de temperatura y carbonización.
La "cervecera personal", que costará más de 5.500 dólares neozelandeses (casi 3.000 euros), su máxima función es reducir las cuatro semanas para poder beber el primer sorbo, que es lo que tarda de manera tradicional.
Pero además, la máquina busca dar un sabor uniforme al brebaje dado que muchas veces las cervezas caseras tienen un sabor muy amargo, demasiada levadura o simplemente es muy aguada.
La máquina, tiene tres funciones: el método básico, el avanzado (que requiere más ingredientes y puede preparar 78 tipos de cerveza) y el creativo.
La elaboración de cerveza casera es un pasatiempo popular en Nueva Zelanda desde 1970, aunque son pocos los aficionados los que se mantienen totalmente dedicados a esta práctica.
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